¿Cómo habéis evolucionado como coleccionistas?

[Peskadorm]

Buenas noches, un día apagas el ordenador después de pasarte por Reverso y Anverso y siete años después se te ocurre volver y lanzar una pregunta al aire:

¿Cómo habéis evolucionado como coleccionistas?

No os pregunto por qué coleccionáis, eso se ha preguntado aquí muchas veces y todos dimos nuestra razones sentimentales, psicológicas e incluso psiquiátricas. Es más una cuestión de cómo han evolucionado vuestros gustos, vuestros estados de ánimo, el lugar que ocupa la numismática en vuestra escala de prioridades a lo largo de diez, treinta o cincuenta años. A cuento de qué viene esto, os preguntaréis. Resulta que he entrado a la sección de saludos y despedidas (¡qué buenos compañeros se nos han ido!) y veo un patrón que se repite en los que vuelven después de muchos años: sus intereses han cambiado. Y los míos también.

Así que, a modo de ejemplo os contaré cómo he evolucionado yo, y espero que os animéis y participéis, aunque no sea con un tocho tan largo como este.

Primera fase: el cebo. Para empezar diré que soy del 82, así que más o menos a principios de los noventa, tras coleccionar muchos dinosaurios de plástico, maquinaria a escala, cromos del bollycao y muchos kilos (consecuencia de coleccionar cromos del bollycao), empiezo a ver que las monedas con las que me compro los cromos de Colecciones Este llevan dibujitos diferentes según el año. Empiezo a guardar una por cada diseño. El señor me ilumina y guardo las 500 pesetas del 94. Me apodero de las monedas extranjeras que tienen mis padres por la casa; con el tiempo, caerían también las de la abuela.

Segunda fase: Cacemos países. Una moneda por cada país, qué idea tan feliz, seguro que a ninguno se os había ocurrido. A finales de los 90 empiezo mi particular caza en mercadillos, ferias, gente que se va al extranjero, extranjeros que vienen a España… Sigo coleccionando las atractivas monedas españolas de los 90 y encima llega el Euro. Aún así, la numismática sigue siendo para mí una afición más.

Tercera fase: San eBay. Año 2005, despiporre total. Compro monedas mundiales por kilos. Compro monedas españolas por kilos. Colecciono por países, por años, por cecas, por variantes… Intercambio monedas con media Europa. Compro material y encartono hasta las monedas de “La Ruta del Tesoro”. Me entero de la existencia de euros conmemorativos y me desespero tratando de tener esa colección al día. La colección supera las 2000 monedas, en su mayoría chatarra. Hay páginas en los álbumes con la misma moneda veinte veces repetida con diferentes fechas. Mi vida gira en torno a las monedas y la euforia que me provoca cada paquete que recibo cada vez dura menos. Es una droga.

Cuarta fase: El pelotazo. 2009 y salen las conmemorativas del décimo aniversario del Euro. Encuentro la variante de estrellas grandes, lo publico en varios foros y se la doy a facial a los compañeros y contactos que expresamente me la piden. También me contacta un distribuidor austriaco y empiezo a coleccionar plata. Consigo poner la colección de euros al día y ahora me estresa mantenerla. La crisis aprieta y pongo la colección en standby. Siento que ya “lo he hecho todo”.

Quinta fase: El desencanto. Año 2015. Las tarifas de Correos hacen inviable el intercambio de euros conmemorativos y lo abandono. Sigo guardando lo que va saliendo del monedero y las conmemorativas españolas. Las monedas de 12 euros ahora valen 30 y dejo de coleccionarlas. Las monedas mundiales están repartidas en cinco álbumes y no les hago ni caso. Con la salida de los euros andorranos consigo poner al día los euros conmemorativos… por última vez. Me cabrea cada moneda conmemorativa que se anuncia. Tengo más de 3000 monedas, una tercera parte euros circulados, y la colección ocupa un armario entero; es inabarcable y me empieza a estorbar.

Sexta fase: La selección. Y en esta fase es en la que me encuentro desde hace un año. Soy feliz cribando las monedas mundiales, dejando una por referencia del KM. Acabo de cargarme dos álbumes de los grandes. Los siguientes serán los euros que he ido guardando por fechas, unas 800 monedas. He ingresado en el banco 420 euros que tenía en moneda circulada repetida “para intercambiar” que llevaba más de diez años durmiendo el sueño de los justos, y me he comprado un bonito cuadro para el salón. Algunos días saco la plata y la sobo y resobo en un sillón junto a mi cuadro. Ya no miro más que las novedades de España, paso completamente de los euros. He dejado de acaparar y he empezado a coleccionar. De vez en cuando, cada tres o cuatro meses, me doy un capricho y me compro una onza o una moneda del centenario. Este mes toca.

Y vosotros, ¿en qué fase estáis? ¿Qué me depara el futuro?

[sevilla]

Pues, cambiando las fechas, crei que estaba leyendo mi biografia jaja incluso en lo de los kilos
Despues de idas y venidas con monedas mundiales de poco valor y de las españolas por año, empezamos con los euros con todas las series y años y variantes de canto y variantes de cualquier cosa, sobre el 2010 dejo tantas series y me limito a euros con KM nuevos, conmemorativa y algunas de plata, pero sigo con las españolas tipo medievales y 8 reales y similares, de ahi paso a las romanas tambien asi como cualquiera que sea antigua, pero eso si, nada de chatarra, se acabo el comprar por tener, y eso ya con 40 años,cada vez me vuelvo mas tiquismiki, si no me gusta, la dejo pasar y no pasa nada, me lo gasto en gambones y punto, se acabo el estar todo el dia intentando aumentar la coleccion de cualquier forma, sobre el 2015 sigo con mis euros y conmemorativos , pero sin prisas, me centro mas en las antiguas y de calidad, como te digo, creo que con el tiempo te vuelves menos codicioso y mas sibarita en ese sentido, voy a la plaza y disfruto enseñando mis piezas, euros los tiene todo el mundo y ni puedes enseñarlos ni mantener una conversacion sobre ellos que no sea la de que caras se estan poniendo, pero con las antiguas disfruto como nadie, asi que a tu pregunta creo que te espera aun un cambio y es el de voverte aun mas "delicado" con tus compras.
Ahora con 50 colecciono asi, veremos la proxima decada y te cuento tambien

[Peskadorm]

Hola Sevilla, veo que tú también disfrutas ahora más con tus piezas. Creo que la fase por la que he pasado recientemente es un punto crítico en todo coleccionista, o pones orden y marcas unas pautas, o la propia colección te absorbe y la abandonas. A mi personalmente me gusta la moneda española en pesetas porque es algo que entiendo y controlo, y realmente en un futuro me veo sustituyendo piezas de mala calidad por otras mejores, sobre todo los cobres que los tengo hechos una ruina. No pretendo tenerlas todas, pero las que tenga que sean bonitas. No creo que de el salto mucho más atrás porque es un mundo que no domino ni ambiciono, pero sí que me encanta ver monedas antiguas, sobre todo griegas, aunque cuando veo alguna no tengo ni pajolera idea de qué es si no me lo dicen. Y esa debería ser una norma fundamental en numismática: No colecciones lo que desconozcas.

[Carpanta]

Por esas fases creo que pasamos todos en mayor o menor medida, yo también he pasado por romanas, que ya vendí, medievales, que guardo como mi tesoro me encantan pero el bolsillo no da para tanto. Euros, los deje abandonados hace ya mucho tiempo y ahora los tengo metidos como unas monedas mundiales más, cada una con su país y mezcladas con las series anteriores al euro, así no me crea esa ansiedad de que tenía que tenerlas todas conforme salían.

Ahora estoy con lo que de verdad me gustó siempre y que siempre se ha "despreciado" o minusvalorado dentro de esta afición, con las monedas mundiales, colecciono por km y no me agobio con tener todas las novedades, para más INRI y ser más señalado no busco monedas en SC, nunca lo he hecho a no ser que sean actuales y llevo 25 años coleccionando y nunca me ha dado por mejorar mis adquisiciones, con mbc me conformo.

Como ves cada uno somos un mundo y yo soy el raro, nunca he buscado la calidad extrema , no soy inversionista y me gusta pensar en la vida que han tenido mis monedas, para eso fueron creadas.

Saludos

[stangana]

Hola compañero

pues como bien dices todos pasamos por diferentes fases dentro del coleccionismo, en mi caso te contare un poco mi historia.

En primer lugar comenze con 18 años y llevo 22 años coleccionando,en mi primera fase empece guardando todas las monedas de nuestras queridas pesetas una de cada y algunas de diferentes paises que me traian familiares y amigos en sus viajes.

En mi segunda fase comenze coleccionando todas las monedas de euro tanto las normales como las de 2€ conmemorativos despues de unos años y realizando multitud de intercambios sin darme cuenta tenia euros de todos los años,cecas ,paises en total 1 album para cada pais de la eurozona.

Despues de eso entre en una tercera fase, como ya no podia conseguir apenas nuevas monedas ya que lo tenia mas o menos al dia sin contar algunos paises como San marino , Vaticano o Monaco. Empece a poner al dia las monedas mundiales que iba guardando, Aqui vino el desmadre total encontre en internet algunas paginas de intercambios y comence a cambiar con gente de todo el mundo mi coleccion comenzo a crecer hasta llegar a tener unas 10.000 monedas mas o menos

Entre en una cuarta fase, habia sido padre y mi niña me pedia atencion ya no disponia ni tiempo ni ganas de seguir coleccionando.Asi que me fui deshaciendo de los euros por años ,las mundiales tambien y guardando solo un km distinto.Mi coleccion se redujo a la mitad.

y ahora estoy en una quinta fase que como bien decis somos mas selecctivos los euros solo compro las de 2€ que van saliendo nuevos y las mundiales me centro mas en monedas conmemorativas y bimetalicas.

y eso es un poco mi historia

[davmell]

Hola.

Pues veo que todos tenemos algunos puntos comunes en la evolución, algunos habéis asentado la cabeza, otros no... en mi caso, un resumen de fases:

Primera fase: Infantil. Desde los 10 años hasta los 19-20, que empecé, conseguía alguna cosilla que traía algún conocido que viajaba al extranjero (finales de los 80, tampoco era tan habitual viajar tanto como ahora, y conseguir unas monedas de sitios como Yugoslavia o Israel era todo un logro). Conocí en Béjar un coleccionista que me conseguía en el Banco de España de Salamanca (por entonces existía) las series de pesetas sin circular a poco más que facial, y empezaba a conseguir cosillas del Centenario, pocas y comunes, así como las de Franco, que aún se encontraban en circulación.

Segunda fase: Incidente y abandono. Coincidió que yo había salido de casa a estudiar y tenía en mente otras diversiones antes que las monedas con un incidente, que un hermano pequeño decidió invertir parte de mi colección en el kiosco del barrio. Aparte del lógico cabreo, fue una época de decepción y desilusión, y prácticamente dejé de lado el vicio durante varios años.

Tercera parte: Retomamos con San Ebay y Santos Foros. Años después, ya casi en el 2000, con trabajo, algo más de solvencia económica y el conocimiento del mundo de internet, retomo, centrándome en un primer momento en recuperar las pérdidas previas (invertidas en el kiosco y las no conseguidas en su momento en el año, aún a precios relativamente asequibles). Esto se junta con el descubrimiento de ebay, una temporada de varios viajes por Europa (pre-euro aún), donde empiezo a traer monedas para mí y para cambiar, y sobre todo, el inicio de foros de numismática, donde empiezo a intercambiar con coleccionistas. En este momento, tengo las pesetas de Juan Carlos al completo, las de Franco, bastante completas (muchas a día de hoy aún circuladas) y puedo hablar de "centenares" de monedas mundiales.

Cuarta fase: Boom del euro, Anverso y Reverso y de numista. Realmente, lo que ha disparado mi colección, fue a raíz de conocer Anverso y Reverso, empezar a conseguir cosas en compras en grupo, primero a través del extinto grupo La Isla y luego por Madrid, en cuanto a euros, y el conocimiento de Numista, como principal fuente de cambios internacionales, con la base de datos del programa. Aquí, casi hasta día de hoy, llego a una colección de más de 9000 monedas, mundial por tipo, españolas por año, y euros por año hasta 2008, y por tipo más conmemorativas desde entonces.

Quinta fase: Usando términos de moda, hemos doblegado la curva. Podría ser en la que estoy actualmente, con una hija desde hace cinco años, las ganas, no como dice stangana, siguen, pero el tiempo, desafortunadamente cada vez escasea más. Por otra parte, los intercambios internacionales cada vez se complican más, las tarifas de correos los dificultan, y con una colección de tal volumen, para conseguir cosas interesantes, hace falta poder ofrecer cosas interesantes, que rara vez consigo. Lo que antes eran cinco o seis cambios todos los meses han pasado a cero o uno, según qué mes. Sigo cogiendo los dos euros conmemorativos que salen, más alguna novedad mundial a través de compras en el foro, y cuando tengo tiempo, intento ponerme al día, para ordenar las monedas nuevas que, pese a ser pocas, se acumulan sin fichar. En este aspecto, no me he hecho selectivo en cuanto a pretender calidad en cuanto a cantidad, alguna vez lo he pensado, pero sinceramente, sé que no iba a poder desprenderme de miles de monedas mundiales, a priori de un valor bajo, para conseguir una docena de piezas de lujo.

Sexta fase, de aquí a enero... Viene el/la hermanit@, con lo cual, la previsión de futuro es menos tiempo, menos dinero, menos espacio (mi despacho con mi estantería de monedas volará) así que, sin saber cómo, seguro que toca reestructurar y replanificar la situación.